domingo, 13 de diciembre de 2015

Todos los caminos llevan a Roma

No. Sabéis que nunca fue cierto, pues "Caminante, son tus huellas el camino y nada más;[...]". Y el mío no me lleva a Roma, ni termina en Santiago.
Si todos los caminos llevan a Roma, de Roma se sale leyéndolo al revés, dejándose llevar, perdiéndose en sus calles, desdibujando los límites entre los sueños y la realidad.

El Camino no acaba en Santiago. Acaba en un lugar de paz infinita, de pacto entre el oleaje y el faro que corona el acantilado. De gaviotas sobrevolando el cielo, del olor del mar enredándosete en el pelo. 
Mi estrategia es que un día cualquiera,
no sé ni dónde ni con qué pretexto,
por fin me necesites.
                      ~Mario Benedetti.

Ni el camino acaba en Santiago, ni Finis Terre es un cabo.